El nuevo sistema de cotización por ingresos reales sigue en transformación. Y toca preparar la próxima fase: 2026-2028. La Seguridad Social convoca a los agentes sociales para definir los nuevos tramos y bases que marcarán el futuro de los autónomos.
El día 14 de julio, la Mesa de Diálogo Social se volvió a reunir. Sobre la mesa: una revisión completa del sistema de cotización de los trabajadores autónomos. Se avecina un nuevo despliegue de tramos y bases que marcará las reglas del juego entre 2026 y 2028.
La cita, anunciada por el secretario de Estado Borja Suárez en sede parlamentaria, llega tras el primer proceso de regularización de cuotas correspondiente al ejercicio 2023, ya finalizado. Y el balance no es menor: más de 4,2 millones de notificaciones, 1,6 millones de ajustes y una gestión coordinada entre Seguridad Social, Hacienda y mutuas que ha puesto a prueba la maquinaria administrativa.
El sistema de cotización por ingresos reales -en vigor desde 2023- ha supuesto un giro estructural en el RETA. Pensado para acercar la cotización a la capacidad económica real de cada autónomo, su implementación ha buscado corregir una situación claramente injusta: más del 80 % de los trabajadores por cuenta propia cotizaban por la base mínima, lo que se traducía en pensiones hasta un 37 % más bajas respecto al régimen general.
Ahora, con el primer tramo transitorio finalizando en 2025, toca afinar el mecanismo. El objetivo es ambicioso: que el sistema sea «justo, comprensible y previsible», según palabras del propio secretario de Estado. Pero lograrlo exige diálogo, transparencia… y una nueva hoja de ruta para los próximos tres años.
¿Qué se está negociando?
- Nuevos tramos de ingresos y sus correspondientes bases de cotización.
- El calendario de aplicación para 2026-2028.
- La posible revisión de procedimientos para evitar errores y retrasos en las regularizaciones futuras.
Además, se han presentado los primeros resultados de otra reforma clave: la compatibilidad entre trabajo y pensión. Entró en vigor en abril de 2024 y ya ha empezado a cambiar el perfil de las jubilaciones. Las cifras hablan por sí solas: en lo que va de año, las jubilaciones demoradas han aumentado un 25 % y la edad media de acceso ya supera los 65 años.
La nueva regulación apuesta por una transición más gradual hacia la jubilación, eliminando rigideces como la necesidad de haber cotizado el máximo para poder compatibilizar pensión y trabajo. Este cambio, especialmente relevante desde una perspectiva de género, abre la puerta a miles de personas que, por trayectorias laborales interrumpidas, quedaban fuera de esta opción.
Y hay más: cada año de jubilación activa incrementa el porcentaje de la pensión que se puede cobrar, hasta alcanzar el 100 % a partir del quinto año. Además, se han mejorado los incentivos a la jubilación demorada y se ha facilitado el acceso a la jubilación parcial, ampliando los márgenes temporales y exigiendo contratos más estables para el trabajador relevista.
Ver: Balance de la primera regularización de autónomos
¿Qué implica todo esto para ti, como autónomo?
- Cambios en tu base de cotización, con impacto directo en tus prestaciones futuras.
- Nuevas oportunidades para compatibilizar pensión y actividad profesional sin perder derechos.
- Obligación de estar atento a un sistema en constante evolución, que cada vez exige mayor previsión y conocimiento técnico.
Desde nuestro despacho, te recomendamos revisar con antelación tu base de cotización actual, estar al tanto de las propuestas que se debatan en esta nueva fase del Diálogo Social y valorar, si estás cerca de la edad legal, cómo encajar la jubilación parcial o activa en tu planificación.
Como siempre, te acompañamos en cada paso. Y más aún cuando el camino cambia.
Pueden ponerse en contacto con Asesoría Morlán para cualquier duda o aclaración que puedan tener al respecto.
Un cordial saludo,