Son muchos los motivos para encarar la vuelta a clase y al trabajo con energía y alegría. Aunque a veces se nos olvidan… Si conseguimos incorporar a nuestro día a día unas pequeñas pautas, nuestra vida será mucho más saludable y divertida. Para ello es imprescindible que poco a poco vayamos cambiando el chip de modo ocio a modo habitual. ¡Tomad nota!
En cuanto a la vuelta a clase
Restableced los horarios con antelación. No lo hagáis de manera brusca, sino paulatina. Lo mejor es que los niños poco a poco se vayan a antes a la cama y se levanten pronto. Las pautas fijas en los horarios de sueño es una baza muy importante de cara al rendimiento escolar.
Y aquí, como en todo, los progenitores somos su espejo. Vernos listos y con una actitud positiva para empezar el día, ayuda mucho a que ellos dejen a un lado sus cansinas quejas.
Este es el momento ideal para establecer unas pautas y limites en cuanto al uso de los dispositivos electrónicos. Quizás en verano nos hemos excedido, ahora toca ir reduciendo su tiempo de uso paulatinamente, evitándolos sobre todo a última hora de la tarde, hasta lograr unos horarios adecuados en función de la edad.
Es necesario igualmente irles recordando todo lo positivo que tiene el colegio. El reencuentro con los amigos, las actividades propias de estas épocas del año,…
Fomentad su autonomía y responsabilidad. Establecer desde el principio de curso tanto un horario como las tareas a cumplir por todos los miembros de la familia, es un modo muy efectivo de logar paz y cooperación de manera ordenada en el hogar.
Dejad que ellos decidan “consensuadamente” las clases extraescolares a las que quiere ir. E intentad participar en el mayor número posible de actividades que organice el colegio o las asociaciones a las que pertenecen, y si no es posible, explicarles claramente los motivos. A los jóvenes y niños les motiva mucho ver que sus padres están integrados en su comunidad.
Establecer un calendario de actividades a realizar en familia, sin duda fijado por todos.
Por supuesto les encanta tener el material listo a principio de curso. Aprovechad para echar un vistazo a los libros en su compañía y resaltar los aspectos positivos de todo lo que van a aprender en el próximo curso.
Esta es muy buena época igualmente para establecer un calendario de desayunos, comidas, meriendas y cenas. En internet hay muchos ejemplos de menús equilibrados que nos facilitarán mucho el día a día. Aprovechad para pasar un buen rato en familia eligiendo sus platos preferidos y no tan preferidos.
Antes del inicio del curso es crucial mantener una charla con ellos respecto al acoso escolar. Una conversación abierta y sensata puede evitar tanto que sean víctimas, o si así es, que nos lo cuenten lo más pronto posible, como agresores.
En cuanto a la vuelta al trabajo
Para los adultos igualmente resulta crucial ir habituándonos poco a poco al horario, sobre todo en los casos de trabajos que requieren grandes madrugones.
Otra buena idea es no apurar hasta el final para regresar de las vacaciones. Hacedlo con tiempo y dedicar unos días a organizar la vuelta a la vida cotidiana, ayuda mucho en los días posteriores a la reincorporación al horario laboral.
Es más, este es un momento ideal para hacer limpieza general. Está más que demostrado que es muy beneficioso para la salud. Tirad, regalar o reciclar todo lo que ya no se utiliza y poner en orden el papeleo y la agenda, sin duda nos ayudará empezar con ganas, energías renovadas y sobre todo sin estrés el nuevo trimestre.
Y un truquillo más, es mejor incorporarse al trabajo a mitad de semana, hacerlo un miércoles en vez del lunes. Aunque pueda parecer una tontería, ayuda mucho a evitar la tan temida e interminable primera semana de vuelta al trabajo.
Si queréis saber más, en este artículo os hablamos más a fondo de cómo evitar el síndrome postvacacional. ¡No os lo perdáis!